viernes, 10 de febrero de 2012

Hoja de Rayas

Siempre he tenido la tendencia a salirme de la raya cuando coloreo. Me considero una persona perfeccionista de una manera obsesiva por lo cual las metas establecidas y los propósitos no pueden resultar de una manera diferente a la que pretendí.

Quizá esa obsesión degenerativa por el perfeccionismo me inclina a querer salirme de la raya cuando coloreo, quizá busco poder identificar el aura de las personas o agregar un grado humanístico de imperfección a lo que coloreo, solo de ese modo se puede plasmar la perfección de una imperfección.

¿Habrá pensado lo mismo Miguel Ángel cuando terminó la estatua de Moisés? La gente le decía que su obra era tan perfecta que parecía un ser humano real, quizá no le molestó el elogió y realmente cayó en razón de su creación y buscó la verdadera perfección de su obra, para que realmente parezca un ser humano tiene que ser imperfecto por ello lo golpeó en la rodilla derecha, posteriormente lo exhortó a que le dirigiera la palabra.

 Me gusta pensar en la mano de Dios como un fenómeno de aparición constante en nuestra realidad y lo hemos visto en varios personajes, que a través de una determinada inspiración extraída de lo más profundo de su intimidad, exactamente donde nacen los suspiros del Creador alentando a la perseverancia.

Cuando escribo tiendo a darle preferencia a las hojas que tienen rayas marcadas para limitar las oraciones y las palabras a un renglón y así poder seguir el orden que busco y no soy capaz de alcanzar, por ello prefiero las hojas con rayas marcadas en lugar de las hojas perfectamente blancas en donde fácilmente se cae en el error. ¿Será lo inalcanzable la raíz de la búsqueda por el perfeccionamiento?.

Todos luchamos por un determinado objetivo, tangible o intangible. Desde una hermosa melodía que satisfaga nuestras pasiones hambrientas de emociones y colores derivados del sonido de cada nota o la materialización de un objetivo cierto y determinado.

Siempre he considerado lo asimétrico más llamativo que lo perfectamente estructurado, quizá es una marca de nacimiento, o un concepto adquirido de la realidad. ¿Realmente existe la simetría?. ¿Y por qué el arco iris siempre está triste? Seguramente ya se enteró que su existencia depende de el reflejo del agua en el aire a través de los rayos del sol y esa dependencia lo deprime y mantiene su sonrisa como una “U” al revés.

¿De qué dependemos nosotros? Al menos sé que necesitamos algo que ser, alguien con quien estar y algo que esperar. Maldita dependencia, nos engañas haciéndonos creer que limitas nuestra libertad.


Azure

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